Extracto de "Secretos Que Los Mormones No Quieren Que Usted Sepa", páginas 10-15

Copyright © 2011 por Richard y Cindy Benson. Reproducido con permiso.

Secreto 4

La doctrina mormona dice que hay muchos dioses:

Brigham Young enseñó que la cantidad de dioses es innumerable. [8]

“...hay un número infinito de personajes santos, extraídos de mundos sin número, que han pasado a su exaltación y por lo tanto son dioses”. [9]
“...vosotros mismos tenéis que aprender a ser Dioses… como lo han hecho todos los Dioses antes de vosotros”. [10]

José Smith dijo:

“De manera que la doctrina de la pluralidad de Dioses ocupa tan prominente lugar en la Biblia como cualquier otra doctrina. Está en toda la Biblia. Se halla fuera del alcance de toda controversia”. [11]
“En el principio, el principal de los Dioses convocó un concilio de los Dioses; y se reunieron y proyectaron un plan para crear el mundo y poblarlo”. [12]
“Si tomáramos un millón de mundos como éste, y contáramos sus partículas, veríamos que hay más Dioses que partículas de materia en esos mundos”. [13]
“Los dioses que habitan en el cielo… han sido redimidos de la tumba en un mundo que existía antes que se pusieran los fundamentos de esta tierra… También fueron exaltados, de la situación de hombres caídos a la de Dioses Celestiales para habitar su cielo por siempre”. [14]
“Los seres celestiales que habitan en el cielo… habiendo sido llenos con toda la plenitud de estos atributos eternos, son llamados Dioses, porque la plenitud de Dios mora en cada uno. Tanto los hombres como las mujeres disfrutan de esta plenitud”. [15]

Lo que dice la Biblia:

“Mirad a mí, y sed salvos, todos los términos de la tierra: porque yo soy Dios, y no hay más”. (Isaías 45:22)

Lea también Deuteronomio 4:35; 6:4; Salmos 86:10; Isaías 43:10-11; 44:6, 8; 45:5-6, 18, 21; 46:9; Marcos 12:29, 32; 1 Corintios 8:4-6; 1 Timoteo 2:5; 1 Juan 5:7.

Secreto 5

Los mormones creen que los hombres pueden llegar a ser dioses:

“Como el hombre es, Dios una vez fue; como Dios es, el hombre puede ser”. [16]
“...que el hombre es progenie de Dios... llevando dentro de sí las semillas de la divinidad, y siendo, por tanto, un dios en embrión...” [17]
“El Señor nos creó a ti y a mí con el propósito de que lleguemos a ser Dioses como Él mismo… Somos creados... para llegar a ser Dioses...” [18]
“...vosotros mismos tenéis que aprender a ser Dioses...” [19]
“...el hombre es el rey de reyes y el señor de señores en embrión”. [20]
“Cada uno de ustedes tiene, dentro del alcance de su posibilidad, el desarrollar un reino sobre el cual residirán como su rey y dios”. [21]
“Para conocer a Dios, debemos conocernos a nosotros mismos. Todos los atributos personales que se adscriben a Dios… los encontramos en nosotros mismos… El mormonismo no tiende a degradar a Dios al nivel del hombre, sino a exaltar al hombre a la perfección de Dios”. [22]
“Cada mandamiento que obedecemos nos eleva un paso más en la escalera a la humanidad perfeccionada y hacia la divinidad; y toda ley desobedecida es un deslizamiento hacia el fondo donde el hombre se une al mundo animal”. [23]

Lo que dice la Biblia:

“Y oí una gran voz del cielo que decía: He aquí el tabernáculo de Dios con los hombres, y Él morará con ellos; y ellos serán su pueblo, y Dios mismo estará con ellos, y será su Dios”. (Apocalipsis 21:3)

Lea también Apocalipsis 20:6.

Secreto 6

El mormonismo dice que debemos aprender a ser Dioses:

“Esta pues es la vida eterna: conocer al solo Dios sabio verdadero; y vosotros mismos tenéis que aprender a ser Dioses, y a ser reyes y sacerdotes de Dios, como lo han hecho todos los Dioses antes de vosotros, es decir, por avanzar de un grado pequeño a otro, y de una capacidad pequeña a una mayor; yendo de gracia en gracia, de exaltación en exaltación, hasta que logréis la resurrección de los muertos y podáis morar en fulgor eterno y sentaros en gloria, como aquellos que se sientan sobre tronos de poder infinito”. [24]

Lo que dice la Biblia:

“Así dice Jehová el Rey de Israel, y su Redentor, Jehová de los ejércitos: Yo soy el primero, y yo soy el postrero, y fuera de mí no hay Dios”. (Isaías 44:6)

Secreto 7

El mormonismo enseña que en un tiempo Dios fue hombre:

“Hemos imaginado y supuesto que Dios fue Dios por todas las eternidades. Voy a refutar esa idea, y haré a un lado el velo para que podáis ver... en un tiempo fue hombre como nosotros...” [25]
“Recuerden que Dios, nuestro Padre celestial, quizás fue una vez niño, y mortal como nosotros, y se fue elevando paso a paso en la escala del progreso, en la escuela del adelanto; ha avanzado y se ha superado, hasta llegar al punto donde se encuentra ahora”. [26]
“Los profetas mormones han enseñado continuamente la sublime verdad de que Dios el Padre Eterno fue en un tiempo un hombre mortal, que pasó por una escuela de vida terrenal, similar a la que estamos nosotros pasando ahora. Él llegó a ser Dios —un ser exaltado— mediante la obediencia a las mismas verdades eternas del Evangelio que hoy se nos da oportunidad de obedecer… Así Él creció en experiencia y continuó creciendo hasta alcanzar el estado de Divinidad. En otras palabras, llegó a ser Dios por absoluta obediencia a todas las leyes eternas del Evangelio...” [27]

Lo que dice la Biblia:

“Antes que naciesen los montes y formases la tierra y el mundo; desde la eternidad y hasta la eternidad, tú eres Dios”. (Salmos 90:2)

Lea también Habacuc 1:12; Hebreos 13:8; Salmos 93:2; Apocalipsis 1:8.


[8] John A. Widtsoe, Discursos de Brigham Young, p. 22.

[9] McConkie, Doctrina Mormona, pp. 576-577.

[10] Smith, Enseñanzas del Profeta José Smith, p. 346.

[11] Smith, Historia Documental de la Iglesia, vol. 6, pp. 473-479.

[12] Diario de Discursos, vol. 6, p. 5.

[13] Ibid., vol. 2, p. 345.

[14] Orson Pratt, El Vidente, p. 23.

[15] Ibid., p. 37.

[16] Lorenzo Snow, Estrella Milenaria, vol. 54, p. 404.

[17] Spencer W. Kimball, El Milagro del Perdón, p. 3.

[18] Diario de Discursos, vol. 3, p. 93.

[19] Smith, Enseñanzas del Profeta José Smith, p. 346.

[20] Diario de Discursos, vol. 10, p. 223.

[21] Spencer W. Kimball, Enseñanzas de Spencer W. Kimball, p. 31.

[22] Charles W. Penrose, Estrella Milenaria, vol. 23, p. 180.

[23] Kimball, Teachings of Spencer W. Kimball, p. 153.

[24] Smith, Enseñanzas del Profeta José Smith, pp. 346-347.

[25] Ibid., pp. 345-346.

[26] Diario de Discursos, vol. 1, p. 123.

[27] Milton R. Hunter, El Evangelio a Través de las Edades, pp. 104, 115.